Castillo de Praga

El Castillo de Praga no es solo un monumento, sino el corazón palpitante de la República Checa, un lugar donde mil años de historia, arte y leyendas se entrelazan en un escenario monumental que domina la ciudad desde lo alto de la colina de Hradčany. Visitarlo es adentrarse en la historia de Europa Central y descubrir uno de los complejos palaciegos más impresionantes del mundo.

El Castillo de Praga fue fundado alrededor del año 880 por el príncipe Bořivoj, de la dinastía de los Premislidas, lo que lo convierte en uno de los castillos más antiguos de Europa. Desde sus inicios, fue la residencia de los reyes de Bohemia, los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico y, en la actualidad, del presidente de la República Checa. Por sus muros han pasado dinastías, emperadores y personajes ilustres que han dejado su huella en cada rincón del recinto.

El castillo más grande del mundo

Con casi 70.000 metros cuadrados, el Castillo de Praga ostenta el récord Guinness como el complejo de castillo antiguo más grande del mundo, abarcando una superficie equivalente a unos 60 campos de fútbol. Pero más que un castillo, es una ciudadela: en su interior se encuentran palacios, iglesias, jardines, calles y hasta pequeñas casas pintorescas.

Qué ver en el Castillo de Praga

  • Catedral de San Vito: La joya gótica del complejo, donde reposan los restos de reyes y santos checos. Su imponente fachada y sus vidrieras son imprescindibles.
  • Callejón del Oro: Una callecita de casas coloridas, famosa por las leyendas de alquimistas y por haber sido hogar de Franz Kafka durante un breve periodo.
  • Antiguo Palacio Real: Con la majestuosa Sala Vladislao, escenario de coronaciones y banquetes.
  • Convento de San Jorge: El edificio religioso más antiguo del castillo.
  • Palacio Lobkowitz y Palacio de Verano de la Reina Ana: Ejemplos de la arquitectura renacentista y barroca que enriquecen el conjunto.

Curiosidades y tradiciones

  • El Castillo sigue siendo la residencia oficial del presidente checo. Si ves ondear la bandera, significa que está en casa.
  • Cada hora, en la entrada principal, puedes presenciar el tradicional cambio de guardia, un espectáculo lleno de solemnidad y colorido.
  • La leyenda de los alquimistas y los experimentos secretos de John Dee y otros sabios renacentistas siguen alimentando la atmósfera mágica del Callejón del Oro.